lunes, febrero 13, 2006

El alimento del alma


Terminé con Dorian Gray, por fin, la primera vez que tardo más de dos días en ventilarme un libro que me encanta, y no me ha gustado tardar tanto.
Mucha gente dirá que es una ventaja el tener el trabajo cerquita de casa, para mi en este sentido ha sido una auténtica catástrofe, no me da tiempo a leer más de 4 páginas en un viaje...me revienta no poder hundirme en lo que leo, sumergirme, porque lo más seguro es que me pasase de parada.
Otro motivo por el que debo mantenerme alerta es porque da la magnífica casualidad de que mi estupenda colega, "meapagocualradiosinpilas", coge la misma línea que yo, y claro, descortés es no darle coba, o por lo menos prestarse a que te la den, así que no desconecto hasta que llego a mi casa. Y aquí desconecto menos, porque lo que suelo hacer es conectarme al sofá, una media hora y luego aquí, salvo casos de emergencia (clases, cañas, cafeses varios...u horas extra en el "laburo").
Lo dicho.
Voy a cambiar de trabajo, me voy a ir por lo menos, por lo menos....a Alpedrete, así mi vida onírica (por soñar y dormir digo...) se resentirá, pero de lo que es el alimento del alma y la mente, me voy a pillar un empacho que no veas.
Ganas tengo, lástima que el trabajo me dé de comer al otro importante, ese que ruge cuando dan las 3...

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Siempre puedes coger otra línea que de un rodeo importante ¿no? Lo digo por lo de que es más fácil que cambiar de trabajo creo ;)

Saludos

Anónimo dijo...

Joder, creo que empecé a leer ese libro por segunda o tercera vez hace año y medio. Y no lo he acabado aun. A ver, está bien, es una buena historia, pero es muy lento, me desesperaba leerlo. Entro eso y que me he metido una docena de libros en medio, creo que cuando me decida a volver a intentar leerlo, tendré que empezar de cero.
Eso sí, nada superará los 5-6 años que tardé en decidirme a leer entera 'La Historia Interminable'. Pero éste era porque no me gustaba el camino que tomaba la historia y no quería quedarme con mal sabor de boca, así que yo decidía mi propio final: cuando aparecía Graógraman.
Sí, lo séeee, soy un raro, jaja

iralow dijo...

No eres un raro, a mí me pasó lo mismo con el mismo libro...claro que yo empecé a leerlo con 12 años, y claro, no te gusta pensar que las historias puedan acabar mal, así que hasta los 15 no lo volví a intentar. Reconozco que para que te encante Dorian Gray tienen que gustarte mucho las descripciones al detalle...a mi también me cansan un poco, pero la verdad es que me he metido tanto en este libro gracias a ellas como me pasó con El Perfume. Siendo vasco, ¿como no te ibas a quedar en la parte del león?
Besote

Anónimo dijo...

Jajajaja!!

Cierto, cierto. A mí lo único que me gusta de trabajar a una hora de casa es que las 2 horicas de ida y vuelta me dan para muchas páginas.

Anónimo dijo...

Very nice site! » » »