jueves, mayo 18, 2006

Un estupendo día cabrón



6,45, suena el despertador. Lo apago. Me duermo, son las 7, 30….corro al baño, bebo agua y una araña del tamaño de Wyoming me da los buenos días desde el lavabo…me acojono, dejo correr el agua y se la lleva por el desagüe…mil perdones, lo siento, lo siento, pero estos sustos no se dan por la mañana.

Me ducho, me visto y salgo corriendo…bien, no pierdo el bus…arranca y se da un ostión con un gilipollas que venía adelantando cuando está prohibido, me doy un soberano porrazo con la barra del bus…no me caí de milagro…estupendo, llego tarde.

Café en la oficina, llega un resultado estupendo de una gestión, genial, acto seguido llega una mierda de otro trabajo que costó un mundo sacar adelante.

No termino el trabajo para entregar esta mañana, no importa, mañana, porque el jefe hoy no viene así que no tengo la documentación a entregar….

Dan las 3, me voy de camino a otra entrevista…es a las 4, trabajo de coordinadora de servicio de ayuda a domicilio para los fines de semana…tengo tiempo, comeré luego…soy imbécil, una baldosa suelta en la acera lo corrobora…tropiezo, me tuerzo un tobillo y una de mis sandalias favoritas a tomar por culo…son las 3, 45 y no hay nada abierto, mi móvil no ha guardado el número de la empresa, me meto en un bar cojeando, pido una guía y lo busco…no es allí, es en otra sucursal, después de haber cojeado 20 minutos en busca de una zapatería y saber que no llego (ni ganas ya) puntual, consigo contactar, cuento mi accidente y pido cita para el día siguiente, no hay problema…te llamamos (no sé yo…). Me siento y pido una ensalada y una coca light (estoy a dieta…) y rumio mi mal humor junto con la lechuga.

Me río de mi misma, no me queda otra, y entre que me tomo un café con hielo y sacarina (sigo a dieta…) llega mi compañera de clase, y me ayuda a reírme más del día capullo…y solo son las 5, le digo…más risas.

Dan las 6,30…a clase…cuento las anécdota (después de comprarme unas sandalias por el módico precio de 5 € en el único chino que abre puntualmente antes de su hora!), y nos descojonamos en grupo…mejora mi humor, a pesar de que llevo los pies negros por arrastrar los pies y no perder la sandalia…toallitas húmedas (también del chino) y limpia y fresquita en 2 minutos…descanso de clase.

Sorpresa, son las 7,45 y aparece una antigua compañera, finalizamos la clase en el bar, metiendo más risas al saco…

9,30, cojo el bus para casa, llego a casa, me preparo la cena (filetito a la plancha…¿he dicho que estoy a dieta?), me tumbo en el sofá y resoplo…por fin se ha terminado el día…son las 23,10 y escribo esto, para dejar constancia de que hoy ha sido un estupendo día cabrón.

6 comentarios:

Unknown dijo...

MMM....suena a guión cinematográfico...presentalo en un estudio de hollywood, y ya tenemos peli para la Juliana Robertos y para el Tomas Crucero...
jejeje

besos Ira,

Katsu.

terminus dijo...

Huy, me parece que has tenido un día parecido al mio. Acabo de llegar de una pequeña juerga con unos amigos despues de un día para olvidar.
Resulta curioso lo que consiguen unas cuantas cervezas y una conversación chorra. Y yo he dejado la dieta, que le den.

Un Beso

Edu

Anónimo dijo...

Siento la defunción de tus sandalias, sé lo triste que es perder un zapato perfecto. Sniff...

Vale, un día cabrón, pero acabarlo con risas es la mejor venganza contra el destino.

Un besazo, guapísima.

Unknown dijo...

Cuidate, Iralow.
MI cometido en este comment no es otro que saludarte y decirte que..
y que...
y que...
y tambien que...
Bueno! Me acabo de dar cuenta de que estaria horas contandore cosas! :)))

Como son las cosas! :P

Ala, lo dejamos aqui.

Te encantaria este libro;
"Filomeno a mi pesar" de Torrente Ballester

Saludos de Katsumoto K. O.

MAHOG dijo...

Ah, conozco esos día de mierda y si has terminado riendo, no ha estado tan mal. Joé... y como me suena lo de la "operación Biquini" ojalá tuviera la mitad de fuerza de voluntad que una babosa.

Anónimo dijo...
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