martes, octubre 14, 2008

Aquellos maravillosos años chuzos...


Paseando por estos mundos de Diox, he leido un bonito post sobre Whitman y el arte de usar el rollo culto para mojar...o para deshacerte de algún pretendiente no deseado...según diferentes comentarios de los ilustres visitantes de esa estupenda "Barra Virtual" (linkeadita a un lado de esta mi casa).
El caso es que el comentario ha sido tan largo, y me ha traído tan buenos recuerdos, que he decidido que mis tareas escribanas de hoy estaban hechas...paso a transcribir...y seguro que algunos de los que leáis esto volveréis a aquellas noches norteñas de sidra, salitre y... el comentario reza tal que así:

"...antes de leerme los 32 comentarios tenía una ligera idea de lo que quería decir...ahora tengo que releer el post......vale, reconozco que descubrí a Whitman con los poetas muertos...que lo reencontré a petición de lectura de boda civil...y confieso que la conversación más kafkiana que he tenido en bar para ligarme fué en la noble Gijia en la ya desaparecida tasca La Rioja (R.I.P), segunda casa y primer y último bar de mil noches golfas, con un tío que no sé si por tirarse el pisto o no saber que decirme me contó que trabajaba "en el alambre"...a lo que yo pizpireta respondí "¡anda, como mi padre!", recordando otra célebre ocasión en que mi hermano con 6 años le contestó esto mismo a su profesora...quien acto seguido volvió a cuestionar si mi padre era funambulista... ...a todo esto, el tío (que ni era gafapástico ni perrifláutico) me miró ojiplático y boqueó como un lenguao...momento que aproveché para colarme tras la barra y con el beneplácito de Jose (mesonero de pro...) servirme otro whisky..."

Ay...a veces desearía que todas las noches fueran de esas...pero entonces me acuerdo del día después...y todavía me entran más ganas...soy de memoria frágil...mi cuerpo no recuerda los resacones y los desayunos con coca cola y gelocatil...

10 comentarios:

Unknown dijo...

En estos momentos es cuando más me mola mi memoria selectiva, porque yo solo recuerdo lo bueno. Mi cerebro debe tener algún programa para que, sin la clave, no pueda acceder a esa información...

... la putada es que la clave la suelen tener l@s cabronaz@s de mis amig@s que parece que disfrutan haciéndome recordar las resacas, las caidas y todas esas cosas que tan feliz estaba sin recordar.

muuuack

Anónimo dijo...

leí una frase genial hace tiempo en un blog, no tanto de ir de culto como ir de poeta, artista o lo que sea, decía: "mira qué sensible soy, bájate las bragas"

y reconozco que a menudo mi actitud es esa misma

Canichu, el espía del bar dijo...

yo también lo lei... y desde mi experiencia he de decir que cierta vez que recité en un bar... esa noche tuve una amanecer acompañado... si es que os mola teatrillo... dicho cariñosamente.

Capazorros dijo...

¡Benditas resacas! Son la consecuencia logica de..... no se, no me acuerdo.

Isabel Barceló Chico dijo...

Por mi parte, soy bastante desastrosa como bebedora. Creo que la resaca me entra antes incluso de que me llegue el vaso a las manos... Bendito Withman.

Doctor Spawlding dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
pcbcarp dijo...

Sinceramente, no termino de comprender cómo os gusta ese pervertido yanki de la barba florida. Si lo que le ponía eran los efebos uniformados con grandes mutilaciones postartilleras... De veras, no hay más que leer sus diarios de guerra.

En realidad, yo contra el tipo no tengo nada, pero sí contra la gente que lo saca a colación en esos momentos...

pcbcarp dijo...

Bueno, y, para las mañanas siguientes, está descrito el "síndrome del coyote" (nada que ver con mi amigo Capazorros)

Priamorex dijo...

Un beso. Y Una Sonrisa.

Isabel Barceló Chico dijo...

Reaparece, iralow, estamos en fechas de espíritus... Besitos.