martes, septiembre 25, 2007

Tardes


Esta tarde me sentía así, y como bien se aprecia, no soy de publicar fotos mías, pero quería que supieras que esta señorita es la que escribe esto, esa es la sonrisa que tiene mientras lo hace, y esa también es para ti.



Los días sin sol empiezan a llegar, mañanas de luna.
Tardes de luna.
Tardes que se buscan viernes.
Tardes que se esperan tarde.
Tardes llenas de trabajo y de sueños,
tardes que caminan hacia el invierno.
Invierno que en mucho tiempo no llega tarde,
invierno lleno de luz a pesar de la luna y sus tardes.

Dile a Lorenzo que le espero en primavera,
que me guarde un hueco junto a su toalla.
Tardes que se encenderán como una bombilla,
que traerán siempre buenas nuevas.
Que me pillarán por sorpresa y desprevenida
siempre con una sonrisa,
Siempre con un beso a flor de labios.

Para ti, por ser tú.
Ahí va tu segundo regalo de cumpleaños.

miércoles, septiembre 19, 2007

Un comienzo...


Son las 21,48h, y me acabo de sentar tras un paseito con las peques por el parque.

Mil cosas han pasado, mil más han de pasar y mi futuro pudiera estar al otro lado del gran Atlántico...o apenas a dos paradas de metro de mi casa...y en eso estoy.

La frase que más repito últimamente es esta: esto de estar en el paro es un no parar...y es cierta. Sobrinas, familia, amigos desatendidos, o no, simplemente el verano vino y nadie supo como fue...y ahora toca volver a hacerse con las riendas del día a día. Y al ser quien se supone tiene más horas disponibles pues es de lógica que todos quieran disponer de ellas ¿cierto?

No pasa nada, después de todo es lo que me gusta, no parar, no tener tiempo para pararme a pensar, aunque ahora me encantaría tenerlo para perrear en la cama...o para pasar 6 horas en un autobús...o para tener la posibilidad de volver a la capital un martes en lugar de un domingo...

Me encantaría tenerlo para todo eso, que es relativamente nuevo, y para todo lo que siempre ha formado parte de mi vida...pero hay cosas a las que sé que me va a costar volver a cogerles el tranquillo, cosas a las que voy a dejar un poquito más de lado, cosas que aunque importantes no son imprescindibles en mi día a día... o tal vez si lo sean, pero sean más conscientes que yo misma del hecho de que no puedo hacerlo todo en tan solo 24 horas.
Tal vez sepan tener más paciencia conmigo de la que yo la tengo con ellas.
Tal vez puedan entender que ahora mismo necesito tiempo para mi, mucho mejor que de lo que yo lo hago.